sábado, 30 de julio de 2011

"Ahora, baila."

Es verdad que tenías
muchas cosas. Las veces
que comienzo a escribir
sin mucho fundamento
que digamos, regresan.
Y todo queda en verbo
imperfecto, 'épuisé',
en giro que se agota
y sin embargo calma,
monótono sentir.

Tenías, por ejemplo,
libros que se apareaban,
biblioteca de estantes
robustos y ladrillos
que quizá eran Palmar.
Ya lo ignoro. "Tenías"
es como preguntarme
sin treguas qué te hacía
singular. Como un modo
ciego de la memoria.

La belleza que Auden
explicara al hablar
de Shakespeare, sus sonetos:
eso tenías. 'Charis'.
Yo no puedo creer
que te hayas alejado.
Permití que me obstine
--surtidor o cigarra--
en retratar tu forma
para bien de los otros.

miércoles, 27 de julio de 2011

Fragmento fiduciario

Bendigo la maroma. Tres mancuernas
de lija en sal indagan los insomnios
que en deshonor fulgieron,
Procusto de un pulir.

Lustro el emblema de los guantes malva
con ácidos, con fuelles, gran ventosa
que merecí. Breviarios
remedo, permanecen.

Fulcro, señal, precognición ignara:
los tirios me abdujeron,
se estremeció el simún.

Ínclito morbo, dromedario, yeites:
prohijo los decires
de ninguna pitanza.